El futuro de la recarga de vehículos eléctricos

Cargador inalámbrico por inducción BMW

Cierto es que la alternativa más realista por la que todos los fabricantes apuesta, es la «recarga convencional» de vehículos eléctricos desde un punto de recarga que cumplan con la normativa UNE EN 61851 (Sistema conductivo de carga de vehículos).

Recarga por Inducción

La recarga inductiva electromagnética es el futuro de la alimentación eléctrica. Se trata de una recarga inalámbrica que transfiere la electricidad mediante una bobina inductora situada en el pavimento hasta la bobina secundaria que ejerce de receptor y que va instalada en el vehículo. El único inconveniente técnico reside en su menor eficiencia. Actualmente se está investigando más sobre este tipo de recarga, además de lograr un estándar común a todos los fabricantes.

Aunque no sólo se investiga la recarga inalámbrica estática. Hay actualmente marcas que trabajan en prototipos ligados a la recarga dinámica (en movimiento) inalámbrica.

Ya en 2014, Renault investigo la problemática debido a la desalineación de las bobinas transmisora y receptora y diseñaron dos topologías de convertidores para controlar las intolerancias que puedan surgir ante esta desalineación.

De estas dos topologías de convertidores se midieron datos experimentales. Se optó por la elección del convertidor serie resonante que cumplía los requisitos que se debían conseguir respecto la desalineación entre bobinas y otros requisitos como la no existencia de comunicación entre ambos lados de bobinado.

Detalle de interior de electrónica coche eléctrico
Interior electrónica coche eléctrico

Pruebas de recarga por inducción

Actualmente, la empresa norteamericana llamada Qualcomm está en período de pruebas con Renault en las cercanías de Paris, en la cual se ha hecho una pista de carretera con bobinas enterradas en las que circula corriente, estas excitarán la bobina receptora que genera electricidad en la batería que alimenta el vehículo eléctrico, que en este caso será una Renault Kangoo ZE. Gracias a ello, la carga del coche logra mantenerse estable mientras se devoran kilómetros y kilómetros de carretera.

A pesar de que el proceso se realiza en apenas décimas de segundo, esta tecnología permite que el vehículo reciba hasta 20 kW de energía mientras se circula a 100 km/h, que es prácticamente la misma cantidad de energía que se consume cuando circulamos a velocidades de crucero en autopista.

Esta tecnología nos ofrece ventajas como la infinita autonomía y el uso de energía local y de fuentes limpias (renovables). Un ejemplo de ello sería abastecer carreteras a partir de energía eólica en zonas donde se produjese mucho viento o mediante energía solar en lugares donde la radiación es abundante.

Sin embargo, nuestra red eléctrica está organizada por grandes productores energéticos, y este tipo de tecnología propicia un mercado fragmentado y deslocalizado en cuanto a generación se refiere.

A fecha de hoy, son solo pruebas y una tecnología experimental muy poco desarrollada que se propone como alternativa en un futuro

Detalle de cargad por inducción
Tipología de la recarga por inducción

Redes V2G

La problemática actual con el almacenamiento en gran cantidad de energía eléctrica nos lleva a buscar soluciones en los vehículos eléctricos para subsanar esto. Recientemente, se habla del término Vehicle-to-Grid (V2G), cuya traducción sería “del vehículo a la red”. Es un sistema que surge con la problemática del almacenamiento en gran cantidad de energía eléctrica.

Esta tecnología permite una comunicación red eléctrica-vehículo eléctrico, de forma que la recarga de este pueda aumentar o disminuir de potencia, llegando incluso hasta detenerse en función de lo que necesite la red. Este sistema consiste en la inyección de electricidad proveniente de la batería del vehículo eléctrico a la red cuando este no se use para el transporte y la batería este suficientemente cargada y viceversa.

Este término conlleva tres vertientes que se pueden considerar V2G:

  • Un vehículo solar que proporcione energía a la red. Ya desde 1990 este tipo de sistemas ha sido usado y actualmente se usa en grandes vehículos, tales como cohetes.
  • Un vehículo de combustión (híbrido o propulsado por fuel), genera energía del combustible cuando se necesita una gran demanda de potencia en la red.
  • Un vehículo eléctrico o híbrido que usa las horas en las que la electricidad es más barata (horas valle) para después ceder esa energía cuando la energía es más demandada (horas punta).

Variantes del V2G.

Centradas en su utilización a pequeña escala. Son las llamadas V2H (Vehicle to Home) y V2B (Vehicle to Building). Se trata de la misma tecnología aplicada a nivel de vivienda o edificio.

En este tipo de tecnologías también se puede buscar el beneficio económico, de forma que reduzcan su factura de luz cargando en horas valle y cediendo a red en horas punta o reducir la potencia de contrato en la vivienda. Otra posible aplicación sería el propio uso de la electricidad del vehículo en caso de corte de suministro.

Contaminación
Contaminación en la generación

La problemática actual es que esta tecnología no es económicamente sostenible, pues hacen falta medidas legislativas, avances tecnológicos y transformación en el sistema energético para que el concepto V2G pueda ser interesante en un futuro. Es una tecnología que en un futuro próximo con la mejora de las capacidades de las baterías y el incremento exponencial de renovables puede dar lugar a una red mucho más estable gracias a una gran cantidad de vehículos eléctricos conectados a la red.